Los riesgos de la inteligencia artificial

Los lectores escriben sobre las garantías de la IA, las viviendas sociales, el punitivismo de las leyes y las plazas y parques sin vegetación

La inteligencia artificial (IA) está transformando rápidamente la forma en que vivimos y trabajamos. Ayuda a mejorar nuestra capacidad para resolver problemas y tomar decisiones informadas. Sin embargo, también hay preocupaciones legítimas sobre los riesgos asociados al uso de estas herramientas. Es necesario abordarlas. La IA puede ser una herramienta poderosa para ayudar a las empresas y organizaciones a resolver problemas complejos, pero también puede ser utilizada para manipular a las personas o para perpetuar prejuicios y discriminación. Es importante que se establezcan y se apliquen rigurosos estándares éticos y de privacidad para el uso de la IA. Es importante garantizar que la IA se utilice de manera responsable y segura. A medida que se vuelve más avanzada, también se vuelve más difícil de entender y controlar. Es crucial que los desarrolladores y los usuarios de la IA sean conscientes de los riesgos potenciales asociados con su uso y que trabajen juntos para minimizar estos riesgos.

Cuando se anuncia una oferta de viviendas sociales, en sus diferentes modalidades, a continuación suelen acompañar estas dos palabras: para jóvenes. Y en los requisitos a cumplir se incluye la edad tope de 35 años. Hay muchos ciudadanos en este país que incluso superando los 40 se ven abocados a vivir con sus padres por las nefastas condiciones laborales de sus empleos además de los inalcanzables precios de la vivienda, ya sea de alquiler o compra. Miles de esas personas se encuentran a día de hoy sumidos en esa situación injusta. Son los grandes olvidados, y lamentablemente son muchos. El Gobierno va a llevar adelante un proyecto de creación de viviendas sociales. Confiamos y deseamos que también se acuerden de los mayores de 35 años.

Fuente: El País