“Chicharito” Hernández asumió rol de “villano” tras ser vetado en el Tri: “No puedo hablar porque me llevo a alguien entre las patas”

Javier ‘Chicharito’ Hernández reconoció que tuvo que asumir el rol de “villano” cuando en 2019 aceptó que cometió una indisciplina que le costó ser vetado de la Selección Mexicana y perderse el Mundial de Qatar, aunque no puede dar más detalles porque hay alguien más involucrado del Tri y no lo quiere afectar.

‘Chicharito’ jugó por última vez con la Selección Mexicana en 2019, el 7 de septiembre, en un amistoso contra Estados Unidos en Nueva York donde el Tri venció 3-0 y en el que Hernández anotó un gol, en Nueva York. El técnico era Gerardo Martino.

Cuatro días después, México cayó 4-0 ante Argentina, una derrota en la que no participó ‘Chicharito’, ya que en ese entonces se reportó la indisciplina de Hernández y otros jugadores, supuestamente Miguel Layún y Guillermo Ochoa.

De acuerdo con reportes, ‘Chicharito’ visitó un lugar llamado “Lavo Brunch NYC” en Nueva York acompañado de Ochoa y Layún con algunas mujeres, que poco fueron se identificaron como supuestas “influencers y modelos”, aunque otras versiones decían que se trataban de prostitutas.

Esa indisciplina le costó ser vetado de la Selección Mexicana y hasta hoy no ha vuelto a recibir una convocatoria.

“NO PUEDO HABLAR”

“Lo más importante aquí fue que sí lo reconocí (la indisciplina), y a tiempo y todo, pero hay algo en el cual no voy a poder hablar, y que no puedo hablar porque me llevo a alguien entre las patas y no lo voy a hacer. O sea, así tenía que pasar. Yo así tomé la decisión de que así fuera”, dijo ‘Chicharito’ Hernández en una entrevista con Fox Sports.

“Yo asumí un rol de villano, para la gente que no ha entendido esto: hubieron cuatro años de proceso, verdad, que yo no estaba. Los primeros dos años, ¿de quién se habló más en la manera más negativa?”.

‘Chicharito’ recordó cómo su situación familiar también se vio afectada, que llegó en 2020 a Los Ángeles y sufrió en sus primeros juegos con el Galaxy.

Fuente: Latinus