Luchando por frenar el envejecimiento con la más sofisticada tecnología

Ya sabes cómo se produce un infarto de miocardio: la placa se acumula en las paredes de las arterias, actuando como una barricada al estrechar esas vías e interrumpir el flujo sanguíneo. Al final, las arterias se estrechan tanto que el corazón no puede recibir suficiente sangre. El oxígeno se interrumpe y se produce un infarto de miocardio o un ictus.

Existen varias formas de tratar los infartos de miocardio, despejando o desviando las arterias mediante stents bypass. Pero estos métodos tienen un coste elevado: cateterismo, cirugía a corazón abierto, rehabilitación prolongada y un sistema circulatorio comprometido. En la actualidad, se están descubriendo nuevas tecnologías (como los nanobots que eliminan las placas) que, en última instancia, nos ayudarán a vivir más tiempo y con mejor salud.

Éstas son algunas de las que se están desarrollando y de las que nos esperan en el futuro.

Regeneración de órganos o tejidos

Un profesor de Harvard (Estados Unidos) trabaja en una técnica que permitiría que el LCA (ligamento de la rodilla) se cure por sí solo, en lugar de tener que sustituirlo por un tendón de otra persona o animal, o de otra parte del cuerpo.

Esta técnica consiste en insertar una esponja en forma de reloj de arena llena de sangre del paciente y factores de crecimiento y células madre reactivadas para que actúen de puente entre las dos piezas desgarradas. Las piezas del puente crecen y reconectan el desgarro, por lo que no hay que recurrir a una reparación intrusiva con otros tejidos blandos.

Las implicaciones van más allá de la simple mejora del rendimiento deportivo; el procedimiento también podría ayudar a reducir la incidencia de la artritis que suele seguir a las actuales reparaciones del LCA.