Persigue Turquía a constructoras de edificios colapsados por sismo

El gobierno de Turquía, ante la presión social realizó arrestos masivos y prometió perseguir a los constructores inmobiliarios vinculados a los derrumbes de edificios en el terremoto de hace una semana, mientras la ONU reconoció que los esfuerzos de ayuda en Siria han “fracasado”.

A medida que las posibilidades de hallar más supervivientes disminuían, el número de víctimas en Turquía y Siria por el terremoto del lunes y sus principales réplicas superaba las 33 mil, y parecía que seguiría creciendo. Ha sido el terremoto más mortífero en Turquía desde 1939.

Los últimos balances hablan de 33 mil 179 fallecidos (29 mil 605 en Turquía y 3 mil 574 en Siria), una cifra que podría duplicarse.

Algunos afectados por el sismo y políticos opositores han acusado al gobierno de lentitud y de una reacción insuficiente en las primeras tareas de socorro, y los críticos han cuestionado por qué no se recurrió antes al ejército, que desempeñó un papel clave tras el terremoto de 1999.

En medio de la destrucción, la atención en Turquía se centra en lo que las víctimas del terremoto y los expertos en construcción han llamado construcciones inferiores que dejaron las casas de las personas particularmente vulnerables al colapso.

Frente a la creciente indignación, retratada en la prensa y difundida por las redes sociales, las autoridades turcas reaccionaron con decenas de detenciones y mandatos de arresto que se multiplican.

El ministro de Justicia, Bekir Bozdag, informó ayer que 134 personas habían sido detenidas y otras siete tenían prohibido viajar al extranjero por cargos relacionados con el derrumbe de edificios.

Dos contratistas responsables del derrumbe de edificios en la ciudad de Adiyaman, Yavuz Karakus y Sevilay Karakus, fueron detenidos en el aeropuerto de Estambul. Llevaban más de 17 mil dólares en efectivo y planeaban volar a Georgia.

El Ministerio de Justicia estableció oficinas de investigación de delitos sísmicos en las áreas afectadas, y designará fiscales para presentar cargos contra contratistas y otras personas relacionadas con edificios mal construidos que se derrumbaron, matando a sus residentes instantáneamente y dejando a otros enterrados en las ruinas a temperaturas cercanas al punto de congelación.

Murat Kurum, ministro de Medio Ambiente, dijo que más de 24 mil edificios en la zona del terremoto sufrieron graves daños o se derrumbaron, según una evaluación de unos 170 mil edificios.

El destino de la residencia “Rönesans” se convirtió en un caso emblemático de las malas prácticas denunciadas.

El conjunto residencial “Rönesans” (Renacimiento) construido en Antakya, en el sur de Turquía, tenía ocho plantas y 250 apartamentos. Fue levantado hace diez años y contaba hasta con una piscina. Presentado como un entorno de lujo, la torre se derrumbó sobre sus habitantes.

Hasta ahora, los constructores y emprendedores corruptos lograron arreglárselas, pese a las reiteradas alertas de ingenieros y arquitectos reconocidos”.

Con información de El Sol de México