En base a la extensa diversidad cultura que existe en el mundo, es bien sabido que en muchos lugares del mundo, las cebollas son un alimento básico, mientras que la carne es más un lujo, sin embargo en Filipinas su precio se ha disparado por encima del pollo o la carne de res.
Desde la época de la colonización española, que duró entre 1521 y 1898 e influyó mucho en su cocina, la costumbre de saltear con ajo y cebolla ha prevalecido en el país asiático.
Sin embargo, desde el inicio de este año y durante casi un mes, las cebollas se han convertido en un artículo de lujo para los filipinos. Destacando que después de un aumento en los precios, la verdura cuesta más que muchos tipos de carnes.
Para comprender un poco más la comparación; el kilo de cebollas rojas y blancas alcanzó esta semana unos US$11, mientras que un pollo entero se podía comprar por unos US$4, esta cifra es más alta que el salario mínimo diario en Filipinas, que se sitúa en torno a los US$9.
Con el aumento de los precios, las autoridades del país incluso han incautado envíos ilegales de cebolla.
Se interceptaron cebollas de China por un valor de US$310.000 después de un intento de contrabandearlas como si fueran ropa, a principios de enero.
Nicholas Mapa, economista sénior del banco ING que vive en la capital de Filipinas, Manila, señaló que algunos restaurantes incluso han dejado de vender productos que contienen cebollas.
En el caso de algunos menús las porciones de aros de cebolla que normalmente vienen con las hamburguesas, han desaparecido.
“No pueden fijar el precio de sus productos correctamente o simplemente no pueden suministrar cebollas”, comentó a un medio internacional vía correo electrónico.
Ante tal situación algunas empresas están buscando alternativas, como es el caso de el cocinero Jam Melchor, fundador del Movimiento para Preservar el Patrimonio Culinario de Filipinas, ha estado buscando reemplazos.
Finalmente, ha recurrido a un tipo de cebolla autóctona llamada lasona, que tiene un sabor diferente a las variedades utilizadas tradicionalmente y es muy pequeña, del tamaño de una uva.
Comentó a un medio internacional; “Tanto los restaurantes como la población en general han sufrido la situación. El precio actual de las cebollas es demasiado alto, por lo que estamos tratando de aprovechar al máximo las alternativas que tenemos disponibles”.
Jam Melchor concluyó; “Las cebollas son muy importantes para la cocina local. Están presentes en casi todos los platos que preparamos aquí. Es un ingrediente crucial en toda la cocina filipina”.
Con información de BBC